El Árbol de Navidad es una Práctica Babilónica

El Árbol de Navidad es una Práctica Babilónica

La Iglesia Evangélica en responsable de alumbrar en medio de las tiniebla. Por lo tanto no puedo callar ante la ignorancia de quienes creen que el árbol de pino es un símbolo de la Navidad de nuestro Señor Jesucristo. No vamos a condenar a los creyentes ni a los inconversos que participan de esta práctica, sino más bien a sacar a luz una mentira para que se reconsidere participar en costumbres paganas. El árbol jamás ha sido un símbolo de Navidad del Señor Jesús. No hay ninguna referencia bíblica saber ello. La Navidad del Señor Jesús no se única en el mes de Diciembre. Es necesario meditar corresponde al nacimiento de Jesús. Si la Biblia no declara cual es la fecha exacta del nacimiento del Señor, y si el Señor no instruyo a Su iglesia a conmemorar su nacimiento ¿Qué hacen los evangélicos participando de una celebración del mundo? Si hay algo incorrecto, deberíamos indagar saber su origen. La costumbre del árbol se origina en Babilonia. Fue el cristianismo romano establecido por el emperador Constantino el que con el afán de “cristianizar” la Navidad Babilónica consagro el pino como símbolo navideño, cuando realidad este era el árbol preferido por Tamuz. Tamuz era un dios adorado en Babilonia. Este ídolo era considerado protector de la agricultura y de los rebaños. Era representado como muriendo cada año y renaciendo a la vida en primavera. El profeta Ezequiel tuvo una visión acerca de los judíos que practicaban la adoración a Tamuz. La fecha del 25 de Diciembre, se estableció en el año 275 por el emperador Aureliano como una conmemoración obligatoria del nacimiento del sol invicto. La iglesia Romana lo adopto a partir del año 336 como la conmemoración del nacimiento de Jesús, supuestamente con el propósito de apartar a los cristianos romanos de sus antiguas costumbres de celebrar el NATALIS INVICTI SOLIES (el nacimiento del sol victorioso), un antiguo culto al sol también practicado por celtas y germanos. De modo que esta costumbre paso de Babilonia a la iglesia romana, y de la iglesia romana a la iglesia evangélica. En algunos templos supuestos evangélicos nuestro tiempo hasta se colca el árbol cerca del pulpito aduciendo que es una “adorno” que algara a los niños. La Navidad se declaro con la intención de recordar al Señor Jesús como el “niño Dios” que necesita de su madre terrenal. No se le declaro como Rey de reyes y Señor de señores. Por lo tanto, colocar el árbol de Navidad no es una práctica cristiana. Esta práctica no tiene apoyo bíblico. No es también una práctica “inofensiva” porque promueve la mezcla de lo pagano con lo religioso, de lo cual los hijos de Dios no deben ser parte. La navidad es una fiesta pagana; es una costumbre religiosa que promueve el pecado. Que obligar a ser parte de un sistema de consumo, de comprar gastar y regalar. El mal llamado “espíritu navideño” no fomenta el temor de Dios, sino fiestas, egocentrismo, borracheras, conflictos, crímenes. Muchos cristianos celebran la Navidad igual que los paganos. Gastan, se endeudan, adornan, sus casas, comen y beben, colocan su árbol y lo adornan. Nada de esto hora a Dios.



*Colocar a Jesucristo dentro de la navidad, no debía ser. La navidad es una hérnica de lo que tomo del escenario pagano 300 años después de que nuestro Señor ascendió a los cielos. El nunca estuvo en el festival del sol ni ha estado. La fecha exacta del nacimiento de Cristo no se menciona en ninguna parte ni en la Biblia. No fue parte de la fe de Cristo, ni de la enseñanza apostólica. Fue omitido por Cristo en su ministerio. Jesús nunca la recordó. No hay ninguna énfasis sóbrela fecha de su nacimiento. El nos enseño que lo siguiéramos y enseñáramos su Evangelio. Debemos regocijarnos por su nacimiento durante todo el año y buscar vivir como El nos enseña en la Biblia.